Mi buen amigo Voro me comentó su intención de abrir un post en Bonsai Global donde se pudiera valorar árboles mediante la crítica pública por parte de los foreros.
Al tener ciertas limitaciones de a la hora de publicar que impedían la correcta visualización de lo que quería mostrar, he decidido hacerlo aquí en lugar de el foro.
A mí me parece magnífico exponerse a la crítica pública. Aunque a veces pueda ser doloroso.
El problema es que no estamos acostumbrados, y cuando se juzga un árbol enseguida se va a buscar defectos, obviando todo lo demás.
También veo que no se ha entendido la intención de Voro. No se trata de decidir si un árbol es bueno o no. O si nos gusta éste más que el otro. Se trata de aprender mediante la observación de árboles, tanto buenos como malos.
También estoy en desacuerdo que no se puede juzgar por una fotografía. Todo lo contrario. Nuestra vista a veces nos juega malas pasadas, en cambio una fotografía (bien tomada, y esto sería otro tema…) es muy cruel con los defectos. Implacable. Te muestra el árbol expuesto desde el frente elegido, a la altura correcta. No hay opciones de bajar o subir un poco la vista, ni ninguna otra. Cierto es el comentario habitual; “en vivo mejora mucho”. La subjetividad de la observación hace que nuestra vista se desplace hacia lo más llamativo (que suele coincidir con las virtudes del árbol), descartando lo menos interesante. Simplemente, nuestra vista, engañada por nuestro cerebro, lo hace invisible, mostrándonos imagen distorsionada de la realidad.
Creo sinceramente que lo más adecuado es valorar el árbol en su totalidad. Y valorarlo punto por punto. Una vez “diseccionado”, y enumerados tanto virtudes como defectos, buscar cómo eliminarlos o disimularlos, y cómo (y esta es la diferencia) potenciar las virtudes.
Si esto lo hace más de una persona sobre el mismo árbol, el resultado es espectacular.
Estos son los puntos que valoramos en la escuela:
- Armonía, uniformidad y coherencia
- Proporciones
- Estabilidad visual
- Carácter
- Movimiento
- Volúmenes y espacios negativos
- Maceta
- Proporción Árbol/Maceta
- Altura
- Tamaño
- Idoneidad de la Forma
- Idoneidad del Color
- Complementos
- Pata
- Labio
- Ornamentos
- Limpieza de la maceta
- Proporción Árbol/Maceta
- Coherencia con el Estilo
- Tronco
- Conicidad
- Corteza
- Nebari
- Naturalidad del Nebari
- Raíces
- Distribución
- Proporción
- Ramas
- Conicidad de las ramas
- Ramificación
- Distribución
- Hojas
- Proporción de las hojas
- Color de la vegetación
- Superficie del suelo
- Refinamiento
- Nitidez del perfil
- Shari y/o Sabamiki
- Jin
- Inclinación de Plantado
- Estado sanitario
- Alambrado
- Poda
- Posición de Plantado
(Esta tabla puede utilizarse desde dentro del programa "Bonsai Manager" para valorar cada árbol de una colección. El programa está disponible en la zona de descargas)
Cada uno de ellos influye en la valoración del árbol, pero hay que ser consciente de que los elementos no tienen el mismo valor para todo el mundo. Ej. Los japoneses valoran mucho lo natural, el Wabi-Sabi. Lo hacen mucho más que nosotros. En cambio en occidente se valora más la espectacularidad (maderas secas, gran tamaño, troncos gruesos….)
Por tanto no se trata de dar un valor concreto a cada punto y sumarlos. De este modo se ha juzgado más de un concurso en España con resultados ciertamente ridículos.
Hay que ser capaces de distinguir entre “valorar” y “juzgar”. Si nos basamos en la tabla de puntuación, sea cual sea, obtendremos el resultado de una instantánea algo subjetiva. Esto no sé si puede ser útil o no. La verdad es que no creo que lo sea para nada. En cambio sí lo es el mero hecho de utilizarlo. Me explico. Ponerse delante de un bonsái propio (mejor si es de una fotografía), y analizar punto por punto, nos hará conscientes del estado del árbol en este momento, y qué aspectos debemos mejorar o, por el contrario, potenciar.
Decía en “El perejil”, que hemos de ver las consideradas como mejores exposiciones tanto nacionales como internacionales, y aprender de ellas mediante la observación de los mejores árboles.
Porqué?, No sería más sencillo aplicar las normas para valorar los árboles?
No
El bonsai es un arte en constante evolución. Hacerlo nos estancaría.
Me han estado mostrando un programa de análisis de webs con el que se analiza la posición que alcanza una página web en los buscadores respecto a una palabra concreta de búsqueda. Como los buscadores no te dicen cual es su sistema para posicionar los resultados de las búsquedas, el programa analiza todos los parámetros de cada web situada entre las diez mejores. Luego compara estos resultados con los de tu propia web. Así consiguen promocionar la posición de una web en concreto, mejorando los puntos donde ésta está por debajo de las demás comparadas. Del mismo modo, nosotros hemos de observar los árboles premiados en estos concursos e intentar averiguar por qué lo han sido.
En algunos de ellos, su mérito es evidente, y coincide plenamente con “las normas”. Pero otros, en cambio, se alejan de la ortodoxia clásica y aún así son premiados. Allí es donde hemos de incidir en nuestro análisis.
Otro aspecto es la formación del observador. Para valorar el tamaño de la acícula de un pino hay que conocer esa especie o variedad en concreto, y las posibilidades y variaciones que ofrece en su cultivo. Por tanto la formación es para mí importantísima a la hora de tomar consciencia de lo que uno observa. Llegó a mis manos un escrito de un aficionado menorquín que confundía la sabina menorquina o sabina negra (Juniperus phoenicea var. turbinata, o Juniperus turbinata), con la sabina fenicia (Juniperus phoenicea), a pesar de que crece en su propia tierra. La ignorancia en estos temas es a veces más importante, ya que nos limita nuestra capacidad de interpretar lo que estamos viendo. La ignorancia sobre temas técnicos, botánicos, y fitopatológicos, evitará que seamos conscientes de la capacidad de crecimiento de una especie concreta, o de sus limitaciones. Decía un buen amigo madrileño, respecto de una corriente que corre actualmente por Centroeuropa y se denomina bonsai “naturalístico”, que estas corrientes que intentan hacer bonsái sin modificaciones sustanciales del material de partida, no son más que el fruto de la ignorancia y de la falta de formación.
Estoy totalmente de acuerdo.