Con la dirección de la revista Bonsái Actual, comienzo una nueva etapa en mi vida profesional en el bonsái. Ha sido curioso ver la diversidad de reacciones de compañeros y amigos. Unos que me dicen “no sabes dónde te metes. Otros que “tendrás que luchar con las miserias humanas”, como si no llevara años haciéndolo. Que si esto, que si aquello,….
Si a uno no le apetece, no se mete en un “fregao” así. Eso es evidente. Nadie me obliga, y lo hago consciente del reto que significa.
Son muchos años de andadura paralela. La revista y yo somos “maduros”, o como diría mi hija, “viejos”. Ambos hemos cambiado radicalmente en estos años. La revista nació cuando no había ninguna información sobre el bonsái. Era para nosotros la Biblia en fascículos. Los primeros números lograron un récord de ventas de coladores de plástico en España. Todo lo que salía en ella, lo debíamos probar.
Esas épocas de descubrimientos y de experimentación dieron paso a las de tomar consciencia del bonsái. Recuerdo mi viaje a Inglaterra, al Congreso Mundial de Bonsái en Birmingham, junto a quien era su director entonces, Jorge Penalba. Creo que era en 1991. Allí recibimos una lección magistral por parte de los japoneses Saburo Kato, y John Naka. No debíamos imitar lo que ellos hacían, sino entenderlo. Bonsái Actual ha contribuido a este entendimiento, más que cualquier otro medio.
Y justo en esos momentos, cuando Internet lo invade todo con “expertos” hablando de lo que desconocen, y toneladas de información producto de “copiar y pegar”, creo que una revista rigurosa, capaz de argumentar lo que muestra, y con unos objetivos de contenidos de calidad claros, es más necesaria que nunca.
Espero teneros a mi lado en esta nueva aventura